Tu inicio no determina tu final.

He llegado a darme cuenta que cada vez que un año inicia, nos llenamos de emociones, sueños y deseos para los próximos 365 días, pero esto, no siempre es así.

Estoy segura que muchos no finalizaron este año como esperaban, quizás algunos sueños que creyeron estar construyendo se caen a pedazos, perdiste un amor, a un ser querido o simplemente hay algo dentro de ti que no te permite mantener una actitud positiva. 

Déjame decirte que tu inicio no determina tu final, y no hablo solamente de un año 2015, hablo de la vida. Como hayas nacido, donde hayas crecido, quienes te educaron y el contexto que te rodea puede impedir o restringir algunas cosas, pero la felicidad y actitud positiva es una decisión, amar es una decisión, soñar es una decisión y como vivirás hasta el último día de tu vida también lo es.

Dos mil quince: de niña muy lejos te creía llegar, hoy te veo tan cerca, se que eres realidad.  Mi vida no es la misma, los años han pasado, decisiones y metas en mi mente han quedado. Puedo aprender del pasado, vivir el presente, más un futuro que no conozco no lo cambio ni demente. 

Quizás no había empezado como debí haberlo hecho, pero hoy decido con el corazón cambiar mi condición. No más negativismo, me rehuso al conformismo, creo en la felicidad y que el amor llegará, quiero aprender a esperar y en Jesús mi confianza entablar. Comprendo que no es como empiezo, sino como terminaré, hoy decido dejar una huella que marque que la vida valoré.